Ven, que vamos a observar a la Luna.

¿Sabes?
Mandé a todos mis sueños a volar con las estrellas, a girar alrededor de la tierra con unos cometas que vi desde mi telescopio, a fundirse cuándo en el futuro se aproximen al Sol.
Ahora, estoy débil.
Quién sabe por qué.. eso de no tener cosas en las cuáles soñar es algo extraño a lo que no estoy acostumbrada.. Algunas veces me siento cerca de la hierba a la orilla del río por la noche, a observar la Luna y su resplandor, su luz que ilumina el camino que se va lejos del cuál no diviso un final.

Estoy allá, lejos, cerca del agua bañada con la luz plateada de la antes nombrada, pensando en si algún día gozaré de la compañía de alguien que comprenda esto que estoy sintiendo, una incomprensión inmensa, qué tiene mi alma por dentro y que como caiga en el agua se hundirá como una piedra.
La hierba está mojada, últimamente no hace más que llover. Oh..me calló una gota en la nariz, y otra en la clavícula derecha..comienzan a caer más rápido, ¡Me estoy mojando! me voy a resfriar..pero no me importa, puedo sentirlo, puedo sentirla, es la libertad.